Jueves 25 de abril de 2024
18 OCT 2018 - 12:02 | Política

La pregunta del millón: ¿Por qué si baja el dólar no bajan los precios?

La divisa estadounidense cotiza en torno a los 37 pesos después de haber estado por encima de los $40 hace tres semanas. Pero los precios nunca bajaron.

El dólar sigue su tendencia en baja pero los precios no retrocedieron luego de la corrida cambiaria de fines de septiembre.

El viernes 28 de septiembre, el dólar minorista cerró en $41,42. El lunes siguiente, 1 de octubre, empezó a regir la política de bandas de flotación del tipo de cambio y desde entonces la divisa se fue deslizando hacia la zona de $37, en la aparece instalada esta semana. Mientras el dólar tiende a estabilizarse no pasa lo mismo con los precios. La inflación de septiembre fue de 6,5%. Y pese al retroceso del dólar, los analistas no ven chances de que los precios bajen.   

"Es muy difícil que haya un retroceso en los precios, lo que si puede pasar es que la estabilidad ayude a desacelerar la suba", indica Camilo Tiscornia, de C&T Consultores. "Todo tiende a aumentar por la inercia inflacionaria. Los precios no suben únicamente por el dólar, la inflación tiene muchos componentes: las expectativas, las tarifas, los salarios, entre otros".  

Además, Tiscornia indicó en clarin.com que "no todos los precios se acomodaron perfectamente al valor del dólar". En el año, el dólar subió 130%, mientras que la inflación acumulada a septiembre es de 32,4%. "El hecho de que el dólar ahora no suba frena una segunda parte de los aumentos. Por eso creo que hay una chance importante de que baje la inflación en noviembre y diciembre respecto de los niveles de septiembre y octubre. Además del dólar, va a jugar a favor que no habrá grandes aumentos de los precios regulados y que las tasas altas de interés frenan la demanda. La inflación podría moverse entre 2 y 3% en noviembre y diciembre, bajando del 4 o 5% que habrá en octubre. No sería una baja menor".

Para Guido Lorenzo, de la consultora ACM, "la inflación se va formando como un proceso. Los precios no suben tanto por lo que ocurrió en el pasado sino por la expectativa de lo que puede pasar. Una vez incorporado ese componente en las expectativas, difícilmente lo puedas sacar". "Hay cierta inflexibilidad a la baja en los precios. Una vez que se fijó un precio, tanto el productor como el comerciante sienten que si lo bajan salen perdiendo", señala Lorenzo. 

"Seguramente si el dólar se estabiliza esto permitirá bajar las expectativas; la inestabilidad juega muy en contra de los precios. La apreciación del peso que ahora se está viendo lo que hace es corregir las expectativas hacia una desaceleración. Entonces lo que habría que ver es la tasa a la que se acelera o desacelera la inflación". El cálculo de ACM es que la inflación será del 4% en noviembre y del 3% en diciembre. "Eso te da casi 48% de inflación anual", dice Lorenzo. Para 2019, el piso estimado es del 30%.