Un ladrón ganó 95 millones de pesos en el Quini 6 y avisó a la policía que no robará más
Es un conocido delincuente de la ciudad de Puerto Madryn, provincia del Chubut, apodado “Rambito”. Jugaba todas las semanas al Quini 6 y ahora se lo ve manejar vehículos de alta gama.
Marcelo Paredes, más conocido en la jerga delictiva como “Rambito”, se ganó un premio de 94 millones de pesos en el Quini 6. Y como antes de eso era un conocido ladrón de la ciudad chubutense de Puerto Madryn, se dirigió a la comisaría local y avisó a los policías: “Muchachos, no robo más”. El dinero lo ganó hace algunos meses, pero la historia se conoció en las últimas horas.
“Rambito” tiene 37 años y comenzó a robar desde que era un adolescente, según El Diario de Puerto Madryn. En sus inicios, su «especialidad» eran los alquileres temporarios, donde ingresaba sin ejercer ningún tipo de violencia y se llevaba elementos de valor que los turistas dejaban mientras salían a pasear. Con el tiempo, su radio de acción se extendió a las viviendas de los madrynenses dejando un tendal de víctimas a lo largo de más de una década.
Durante su carrera como delincuente, “Rambito” reinvertía parte de su botín en jugar al Quini 6 todas las semanas, hasta que en el mes de diciembre la suerte estuvo de su lado: el locutor cantó el 31-09-21-17-03 y el 12, por lo que Paredes se alzó con casi 95 millones de pesos.
A las pocas semanas, “Rambito” caminaba por las calles de Puerto Madryn y al pasar por el frente de la sede de la Brigada de Investigaciones tuvo una idea. Así fue que el otrora malviviente avisó a sus viejos conocidos: «Muchachos, me gané el Quini así que no voy a robar más». Los policías quedaron asombrados, no por la noticia del nuevo rico, sino por el hecho de avisar que, a partir de ese momento, sería un ciudadano honorable y dentro de la ley.
Según contaron fuentes policiales, la relación entre “Rambito” Paredes y los uniformados siempre fue cordial y de mucho respeto y tal es así que, hasta el momento, cumplió su promesa de no volver a robar. Quienes lo conocen suelen cruzarlo por la calle en vehículos de alta gama y con muy buena ropa, haciendo una clara ostentación de su condición de nuevo rico.