Martes 30 de diciembre de 2025
30 DEC 2025 - 11:53 | Sociedad
Policiales

Balcarce: un conductor saturó el alcoholímetro cuando sopló durante un operativo de seguridad vial

El infractor, que venía manejando en zigzag y no podía modular ni bajarse del auto, fue interceptado para realizar un control vial en la Ruta 226. Utilizaron dos dispositivos distintos y en ambos casos el resultado fue el mismo: “desbordamiento de rango”.

El hecho tuvo lugar en el kilómetro 64,5 de la Ruta 226, durante la madrugada del domingo.

Un conductor saturó el alcoholímetro cuando debió someterse a un control durante un operativo de seguridad vial en el marco de los trabajos de prevención para quienes viajan a la Costa Atlántica en el comienzo de la temporada de verano. Los responsables de llevar a cabo el procedimiento se vieron sorprendidos por el vehículo que venía haciendo zigzag en plena Ruta 226. 

El hecho tuvo lugar en el kilómetro 64,5, cercano a Balcarce, de la traza que une Mar del Plata con General Villegas. En la madrugada de este domingo, un control vial rutinario detectó las riesgosas maniobras realizadas por un conductor alcoholizado, según informó Perfil. 

"Venía realizando maniobras muy peligrosas: zigzagueando y a velocidad. Creemos que no estaba en condiciones de ir al frente del volante porque cuando detuvo el vehículo, no podía modular. Ni siquiera podía bajarse del auto", confirmó uno de los agentes que participó del control vehicular.  

El aparato con el que se realizan los testeos de alcoholemia mide en gramos por litro de alcohol en sangre. En este caso, en la provincia de Buenos Aires rige “Alcohol Cero”, es decir, no puede haber ni una gota de alcohol. 

Desde el control vial explicaron: "Hasta 3 ó 4, el aparato puede llegar a marcar la saturación exacta. Cuando excede ese valor, el tester se bloquea. Lo hicimos con dos aparatos de testeos y en los dos ocurrió lo mismo. Un desbordamiento de rango". 

El conductor tomó tanto alcohol que los dispositivos de medición no pudieron establecer un valor concreto de la cantidad exacta de sustancia en sangre. El nivel superaba la capacidad máxima de medida del dispositivo, por lo que el automóvil debió ser retenido y el conductor no sólo fue multado, sino que también quedó a disposición de un proceso judicial. 

De milagro no ocurrió un accidente, ya que especialistas en seguridad vial remarcan que una persona con niveles superiores a tres gramos de alcohol por litro en sangre puede sufrir la pérdida de reflejos y correr serio riesgo de pérdida de la conciencia.