Viernes 19 de abril de 2024
03 NOV 2020 - 20:20 | Deportes

Operan a Maradona: qué es un hematoma subdural y cuáles son las diferencias con la intervención de Cristina en 2013

Los estudios que le realizaron en las últimas horas arrojaron que tiene un coágulo de sangre en la cabeza. En las próximas horas será intervenido quirúrgicamente en la Clínica Olivos.

Maradona llegó a las 19.08 a la clínica Olivos a bordo de una ambulancia de la empresa Swiss Medical que lo trasladó desde La Plata (foto: Telam).

Diego Maradona será operado en las próximas horas tras detectarse que tiene un hematoma subdural, luego de haber pasado 24 horas internado en la ciudad de La Plata.

La intervención se llevará a cabo en la Clínica Olivos hasta donde llegó en ambulancia hace minutos.

Horas antes de conocerse esta noticia, y antes de tener en sus manos el resultado de los últimos estudios, el doctor Luque había asegurado que el entrenador de Gimnasia de La Plata estaba con buen estado de ánimo.

¿Qué es y cómo se trata el hematoma subdural? “El hematoma subdural es una acumulación de sangre en el espacio que está entre las dos membranas que cubren el cerebro”, explicó a Infobae Alejandro Andersson (MN 65.836), neurólogo y director médico del Instituto de Neurología Buenos Aires.

El doctor Cristian Fuster (MN 99838) es un destacado neurocirujano argentino quien operó con éxito a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner en 2013 del hematoma craneal que la aquejara. En diálogo con Infobae, apuntó: “Lo primero que hay que decir sobre el hematoma subdural es que puede ser agudo o crónico, este último fue el caso de la doctora de Kirchner: a partir de que se le presentó un cuadro de cefalea, se le realizaron estudios neurológicos, resultando el diagnóstico de colección subdural crónica. Un punto importante para evaluar el cuadro es el tipo de síntomas, si se trata de cefaleas, de convulsiones, de trastornos de movilidad. Estos determinarán en algún punto también la gravedad del cuadro”.

Y añadió: “No todos los hematomas subdurales son quirúrgicos. Los crónicos están más asociados a los adultos mayores. Es indispensable evaluar el estado clínico del paciente en su totalidad: un hematoma subdural menor de 1 centímetro requiere de una conducta expectante. Si da muchos síntomas, en general se toma la conducta de operar. Hay que saber que de los hematomas subdurales que se operan, en el 30% ocurre un resangrado; además de saber que siempre una cirugía de cerebro conlleva un riesgo. Sepamos que el hematoma subdural es una vena que se aloja entre el cerebro y la duramadre, y una intervención quirúrgica para extraerla requiere una internación en terapia intensiva, que en este tiempo de pandemia es una complicación adicional”.

Por su parte, Claudio Waisburg, neurocientífico, director del Instituto Neuropediátrico SOMA, indicó: “El procedimiento en una persona sin factores de riesgo es bastante sencillo dentro de lo que es una cirugía y no es un procedimiento largo. Las complicaciones tienen que ver con la ubicación y el tamaño del hematoma. Un hematoma grande puede ser peligroso, pero uno pequeño puede permanecer sin generar problemas durante tiempo. Se hacen dos pequeños orificios en dos lugares donde se pueda localizar el hematoma, se abre la meninge y se extrae la sangre que esté en ese espacio. Se hace un pequeño lavado y se observa si hay algún área que activamente esté causando sangrado para cauterizarla. La hipertensión, el sobrepeso, antecedentes cardíacos son factores que aumentan los riesgos del hematoma y de la intervención”.

La operación es corta, y suele durar aproximadamente una hora. Y según Pedro Lylyk, director general del Equipo de Neurocirugía Endovascular y Radiología Intervencionista (ENERI) y director del Departamento de Neurociencias de la Clínica La Sagrada Familia, “en general, la cirugía es una cirugía bien controlada y relativamente sencilla. En neurocirugía no hay nada sencillo, pero es relativamente sencilla y se puede solucionar bien”.