25 JAN 2014 - 09:01 |
Culturas
Carlos Ríos, el gran escritor de La Costa
“Toda la literatura es imprescindible”, dice el escritor nacido en Santa Teresita, que tiene fama internacional y un perfil tan bajo como alto es el talento que se aprecia en sus obras.

Por Gabriela Urrutibehety
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@bloqueD@-Hablemos de geografía: naciste en Santa Teresita, estuviste en México, vivís en La Plata y escribiste novelas que hablan de África o de Chernobyl. ¿Qué significan estos lugares?
-Son mis lugares, espacios más o menos ficcionales que voy construyendo y que a su vez me construyen. Santa Teresita vendría a ser algo así como la usina central: el sitio donde nací y en donde configuré mis núcleos vitales de percepción, los modos de ser y estar en el mundo. Las ciudades y continentes que aparecen en mis libros son amalgamas urbanas y naturales que encuentran, en la escritura y en la vida, insólitas correspondencias y resonancias. Cada experiencia unifica los lugares y abre cauces de unos en otros, como vasos comunicantes. La imaginación los articula y aproxima. La geografía de la experiencia es una sola.
-De la poesía a la narrativa: ¿cómo se realiza este camino? ¿Son etapas diferentes? ¿Qué tiene tu poesía que no tenga tu narrativa, y viceversa?
-De la misma manera que sucede con los espacios geográficos y mentales, escribir unifica registros diversos. La poesía tiene una contundencia que trato de llevar a la prosa, y ésta a su vez tiene un despliegue descriptivo y coral que intento transfundir a los poemas. Cuando escribo no hago diferencias. Poemas largos terminaron como novelas –como es el caso de Cuaderno de Pripyat– y novelas breves fueron resueltas como libros de poemas, como es el caso de La salud de W.R., un librito de “poemas radioterápicos” publicado en 2005 y que se reedita este año en la provincia de Santa Fe.
@bloqueD@-¿Cómo ves la literatura argentina actual? ¿Cuáles son los nombres que marcarías como imprescindibles?
-Veo a la literatura argentina actual en un estado de continua efervescencia. Hay muchísimos escritores produciendo obra, con mayor o menor visibilidad. Como lectores tenemos que ir a buscar esos libros, hacer un esfuerzo más allá de lo que te acerca la mano del mercado. No nos quedemos en esas apariencias. Hay cientos de autores con una obra increíble. Creo que toda la literatura es imprescindible, incluso aquella que desprecio por la deshonestidad con la que está hecha. Cuando digo “toda” pienso en un arco amplísimo que puede ir de, pongamos, Corín Tellado, John Banville o Alejandra Pizarnik a Juan L. Ortiz y Hebe Uhart, de Antonio di Benedetto, J. K. Rowling y Susana Thénon a Dan Brown o el Martín Fierro.
-¿En qué proyectos estás trabajando en este momento?
-Este año saldrán cinco o seis libros en distintos lugares, algunos demorados por los tiempos editoriales y otros por ser de este año. Saldrán novelas acá y en Uruguay, México y Chile, más alguna traducción al inglés en formato digital. También tres o cuatro libros de poemas. En estos días, mi tiempo de escritura se reparte entre ajustes a algunos de esos libros y los nuevos proyectos, apenas esbozados.