Cuál es la situación del mercado inmobiliario en Dolores y la zona
¿Por qué hay tantas casas en venta en Dolores? ¿Cuál es la situación de quienes necesitan alquilar? Una mirada sobre el mercado inmobiliario dolorense y de la Región.

Daniel Musante, propietario de una de las más importantes inmobiliarias de Dolores, dijo que en enero de año llegó a tener 200 propiedades a la venta.
Una recorrida por las calles de Dolores lleva a preguntarse por qué hay tantas casas con cartel de venta en la ciudad, tantas que en algunos sectores pareciera que hay uno por cuadra. Frente a ello, quienes deben alquilar sufren, cuando se termina el contrato, el calvario de buscar un techo donde vivir.
“Siempre ha habido en Dolores un déficit habitacional, al margen de la cantidad de viviendas sociales que han hecho los gobiernos de turno”, le dijo Daniel Musante, propietario de una de las más importantes inmobiliarias de la ciudad, a ENTRELINEAS.info.
Si bien no puede dar una precisión sobre la cantidad de viviendas que serían necesarias, insiste en que “siempre hay una demanda alta de alquileres de viviendas en Dolores”, más allá de las fluctuaciones propias del mercado.
Sin embargo, Musante considera que “ahora la gente está teniendo un problema con el poder adquisitivo porque los sueldos han quedado bastante relegados: cuesta juntar el dinero para pagar el canon locativo”.
La estructura laboral de Dolores es particular por la alta incidencia del empleo estatal. “La ventaja es que tenemos mucho sueldo fijo; eso da cierta tranquilidad y estabilidad. Pero son sueldos que están relegados también”, sostuvo el agente inmobiliario.
¿Cuál es el valor de un alquiler en la ciudad? “Un departamento de dos ambientes en Capital Federal, yo lo estoy alquilando en entre $ 700.000 y 1.200.000 y acá, si le sacamos $ 400.000 ó $ 500.000 es mucho”, explica. Puede ser poco para quien lo alquila, pero son prácticamente imposibles para muchos de los sueldos locales.
En cuanto a las viviendas en venta, concuerda en que es muy grande la cantidad y que este fenómeno se remonta a la post-pandemia. De todos modos, considera que hay menos que hace un año. “En enero de este año yo tenía 200 propiedades a la venta y ahora debo tener 110 ó 120”, sostiene. Un impulso para esto, considera, estuvo dado por algunas líneas de crédito como las que otorga el Banco Nación.
Una de las preguntas que surgen es si el hecho de que haya tanta oferta tiene que ver con una sobrevaluación. “Hay propiedades que vienen de años con cartel. Quizás la hemos tasado en otro momento y han quedado sobrevaluadas”, explica.
La situación económica es un tema clave, pero también el hecho de que buena parte de la oferta la constituyen viviendas viejas, a reciclar. “Y por ahí la gente prefiere hacer algo nuevo antes que comprar una propiedad vieja asentada en barro. Sale más barato hacerla nueva que demoler todo y reciclarla”.
Musante también desarrolla su actividad en el mercado de Mar del Plata, donde “también hay muchas propiedades a la venta, a pesar de que hay un poder adquisitivo más alto y el mercado es más grande”, al igual que en la Costa Atlántica bonaerense.












