Viernes 29 de marzo de 2024
30 JUL 2019 - 10:25 | Sociedad

Mala praxis en Berazategui: murió después de que le extirparan la vesícula por error

El fallecimiento de la mujer de 71 años sucedió en el mismo sanatorio donde hace una semana se conoció el caso de una mujer a la que le amputaron la pierna equivocada.

Las autoridades del Nuevo Sanatorio de Berazategui se mantienen en silencio sobre los casos de mala praxis de los que fueron acusados.

Se sumó una nueva denuncia por mala praxis contra el Nuevo Sanatorio de Berazategui. Esta vez se trata del caso de Teresa Angilletta, que murió después de que le extirparan la vesícula por error, en lugar de desobstruirle el píloro. Los familiares de la víctima hicieron una presentación por homicidio culposo contra el médico que operó a la mujer y todo su equipo quirúrgico.

Paola Stekloff, la abogada de la familia de la mujer que murió, explicó en diálogo con el canal de noticias TN que la denuncia es por "homicidio culposo" hacia el médico cirujano Fernando Javier Palladino -quien operó a la víctima- y que en la presentación pidieron que las acusaciones se hagan extensivas a todo el equipo que participó de la intervención. "Consideramos que los protocolos de seguridad que deberían haber existido abarcaban a todo el equipo", dijo Stekloff.

La letrada explicó que Angilletta había sido diagnosticada con una obstrucción de píloro a mediados de enero y que la intervención que derivó en su muerte fue recién el 30 de abril, a pesar de que los médicos le dijeron que debía operarse de inmediato. Stekloff contó que las hijas de Terese sabían que la operación duraría unas tres horas, pero que al cabo de una hora apareció el cirujano preguntando por la familia de la paciente que había sido "operada de vesícula". Como no había nadie más esperando, los familiares de Angilletta se acercaron, y el médico se sorprendió cuando le dijeron que la mujer debía ser intervenida del píloro.

"Esperen que ya vuelvo", les respondió -siempre según la versión de la abogada de la familia denunciante- el médico, que tres horas más tarde les dijo a los familiares de la paciente que ya había solucionado el problema de la obstrucción. Les explicó que cuando empezó la intervención se encontró con que la vesícula no estaba bien, para justificar su accionar. Los familiares aseguran que el órgano estaba en buen estado.

En los días siguientes (se suponía que iba a estar internada unos 20 días), la paciente no tuvo la evolución esperada. Según relata la familia, Palladino decidió realizar una tercera cirugía exploratoria en el píloro, que no es una operación por laparoscopía sino a estómago abierto. Según les habría explicado a los familiares, por carecer de los clips que se utilizan para la sutura mecánica, cuando la operó habría tenido que realizar una sutura manual. Y temía que algún punto se hubiera abierto.

Pero, al explorar a la paciente, mediante una endoscopía y una ecografía, encontró que el píloro estaba desobstruido y en buenas condiciones. Sin embargo, Teresa no volvió a recuperar la conciencia después de esa intervención y dos días después, el 22 de mayo último, falleció como consecuencia de una septicemia generalizada. Una de las suturas hechas en el conducto biliar en la operación de vesícula se habría abierto y eso hizo que se derramara bilis dentro del cuerpo, lo que le habría causado la muerte.